Coquettes de París
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Re: Coquettes de París
me alegro que te guste Corto :-)
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
Lindísimo andromeda. :badgrin: , está realmente precioso este foro.
Los pies de la Castiglione, eran re feos y gorditos , puede que fuera la moda en esa época.
Sigo pensando que Cleo de Merode, es la más linda de todas estas coquettes.
Los pies de la Castiglione, eran re feos y gorditos , puede que fuera la moda en esa época.
Sigo pensando que Cleo de Merode, es la más linda de todas estas coquettes.
claudia- Invitado
Re: Coquettes de París
Sarah Bernhardt llegó a ser para muchos el último icono del romanticismo que se filtró hasta el siglo XX. Su talento en el arte dramático la llevo a ser conocida en Europa y a convertirse en uno de los adornos más ostentosos de las fastuosas monarquías europeas que, en esos años, aún se mantenían en pie.
Sus textos franceses y su fina belleza, de opacos ojos y pálida piel, la convirtieron en una privilegiada en países como Rusia, donde incluso el Zar y la aristocracia de la época le rindieron pleitesía. Sus velos flamearon en las enormes escalinatas de la alta sociedad de ese país que en su mayoría hablaba francés, por lo que pudieron entender el arte de Sarah.
Sus textos franceses y su fina belleza, de opacos ojos y pálida piel, la convirtieron en una privilegiada en países como Rusia, donde incluso el Zar y la aristocracia de la época le rindieron pleitesía. Sus velos flamearon en las enormes escalinatas de la alta sociedad de ese país que en su mayoría hablaba francés, por lo que pudieron entender el arte de Sarah.
claudia- Invitado
Re: Coquettes de París
Bellísima mujer Sarah... Ahora le veo una expresión un tanto lánguida e inclusive triste en su mirada.
Tal vez era justamente el rasgo que la hacía tan peculiar y de tan fina belleza...
Claudia, como siempre tus fotos espectaculares...!
Tal vez era justamente el rasgo que la hacía tan peculiar y de tan fina belleza...
Claudia, como siempre tus fotos espectaculares...!
cortomaltese- Moderador
- Mensajes : 1946
Fecha de inscripción : 06/08/2007
Re: Coquettes de París
:-) me parece que la mas hermosa es cleo de merode, mas sensual la bella otero, me gusta la biografia de cora pearl, y el exito de ivette, queria preguntar si es verdad que sara berhnard estuvo en 1902 en un palco junto a alicia keppel durante la coronacion de eduardo VII en la abadia de westminster.
sebastopol- Su Alteza Real
- Mensajes : 2048
Fecha de inscripción : 22/09/2007
Re: Coquettes de París
La divina era única. Como Edith Piaf, Sarah también tuvo una infancia desgraciada y llena de miserias con madres que no las quisieron porque estaban totalmente chaladas.
Helena- Non
- Mensajes : 10770
Fecha de inscripción : 21/07/2007
Localización : Madrid
Re: Coquettes de París
Gracias Corto, saben que le veo dos caras distintas, en unas fotos se ve preciosa y en otras no le veo la gracia
claudia- Invitado
Re: Coquettes de París
Es que en algunas ya estaba mayor y ella no envejeció bien por la vida que llevó, esa es la diferencia.
Helena- Non
- Mensajes : 10770
Fecha de inscripción : 21/07/2007
Localización : Madrid
Re: Coquettes de París
Creo que más de una de ellas envejeció mal. Pero de sólo mirar lo que han sido en su época de splendor, me quedo estupefacta ante tamaña belleza, sensualidad o esplendor...
Sebas, Cleo era guapísima, pero la verdad que en sensualidad la Otero me parece más, no?
Sebas, Cleo era guapísima, pero la verdad que en sensualidad la Otero me parece más, no?
cortomaltese- Moderador
- Mensajes : 1946
Fecha de inscripción : 06/08/2007
Re: Coquettes de París
Sí, la Otero era todo fuego, y sabéis? no envejeció mal. Siempre fue una viejecita pobre, pero coqueta y bien arregladita. Su vejez siempre me ha enternecido mucho por la dignidad con que la afrontó.
Cleo era la más bella y la más aristócratica de las cortesanas de su época.
Cleo era la más bella y la más aristócratica de las cortesanas de su época.
Helena- Non
- Mensajes : 10770
Fecha de inscripción : 21/07/2007
Localización : Madrid
Re: Coquettes de París
Estoy de acuerdo en que Cleo de Merode era la mas guapa.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
ELEANORA DUSE: LA LEGENDARIA RIVAL DE SARAH BERHNARDT
Eleonora Duse (Pavia, 1858 - Pittsburgh, 1924) fue una actriz de teatro italiana de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Alcanzó gran fama por interpretar los papeles del escritor noruego Henrik Ibsen.
Se cuenta que nació en un vagón de tren y que su primer papel lo interpretó a los 4 años, ya que su familia era de actores teatrales. Sus padres eran los actores Alessandro Vincenzo Duse y Angelica Cappelletto. Su primer papel protagónico lo realizó a los 14 años;
encarnó la Julieta de Shakespeare y consiguió su primer gran triunfo con La princesa de Bagdad, de Dumas. Se buscó crearle rivalidad con la famosa actriz francesa Sarah Bernhardt, quien era contemporánea suya;
sin embargo, poseían estilos muy diferentes, ya que Eleonora buscaba comprender la mentalidad del personaje y Sarah le imprimía su sello personal a los personajes que interpretaba.
En 1881 se casó con Tebaldo Checchi, unión de la que nació su hija Enrichetta. En 1885 aceptó un contrato para una gira por América del Sur, y entonces su fama, ya excepcional en Italia, sobrepasó las fronteras. En esta época conoció a Arrigo Boito, de quien aprendió el valor del estudio y de la elevación espiritual y cultural. En el transcurso de una gira triunfal por Europa (1891-1892) inició, en Viena, la batalla en favor de Ibsen, imponiendo al público la discutida Casa de muñecas. En 1893 obtuvo un gran exito en América del Norte y en otros países extranjeros.
Retrato obra de Ilya Repin (1891)En 1894 se produjo su primer encuentro con D'Annunzio, que estaba entonces en la cúspide de su fama. El triunfo obtenido en París con Sueño de una mañana de primavera (1897), obra de este autor, la convenció de que había encontrado al creador de la tragedia moderna. Desde entonces su repertorio estuvo formado casi exclusivamente por obras de este autor. Esta relación terminó en 1910, cuando el polémico escritor estaba metido en asuntos políticos (el escritor fue precursor del fascismo italiano) y despreocupado totalmente por Eleonora.
La ruptura de esos amores y una crisis de tipo religioso la llevaron, después de su éxito con La Locandiera de Goldoni, en 1909, a abandonrar inesperadamente el teatro, permaneciendo retirada durante doce años. Durante la guerra de 1914-18 la actriz prodigó su asistencia a los heridos y dio recitales en los frentes. Reapareció ante el público en Turín en 1921 con La dama del mar, negándose a ser maquillada y preocupándose tan sólo de ofrecer al público no una ficción, sino el fruto de una ansiosa búsqueda de la verdad interior. Añadiendo a su repertorio otras obras, reemprendió una nueva etapa de su vida artística, iniciando otra gira por Norteamérica, donde la sorprendió la muerte.
Eleonora Duse (Pavia, 1858 - Pittsburgh, 1924) fue una actriz de teatro italiana de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Alcanzó gran fama por interpretar los papeles del escritor noruego Henrik Ibsen.
Se cuenta que nació en un vagón de tren y que su primer papel lo interpretó a los 4 años, ya que su familia era de actores teatrales. Sus padres eran los actores Alessandro Vincenzo Duse y Angelica Cappelletto. Su primer papel protagónico lo realizó a los 14 años;
encarnó la Julieta de Shakespeare y consiguió su primer gran triunfo con La princesa de Bagdad, de Dumas. Se buscó crearle rivalidad con la famosa actriz francesa Sarah Bernhardt, quien era contemporánea suya;
sin embargo, poseían estilos muy diferentes, ya que Eleonora buscaba comprender la mentalidad del personaje y Sarah le imprimía su sello personal a los personajes que interpretaba.
En 1881 se casó con Tebaldo Checchi, unión de la que nació su hija Enrichetta. En 1885 aceptó un contrato para una gira por América del Sur, y entonces su fama, ya excepcional en Italia, sobrepasó las fronteras. En esta época conoció a Arrigo Boito, de quien aprendió el valor del estudio y de la elevación espiritual y cultural. En el transcurso de una gira triunfal por Europa (1891-1892) inició, en Viena, la batalla en favor de Ibsen, imponiendo al público la discutida Casa de muñecas. En 1893 obtuvo un gran exito en América del Norte y en otros países extranjeros.
Retrato obra de Ilya Repin (1891)En 1894 se produjo su primer encuentro con D'Annunzio, que estaba entonces en la cúspide de su fama. El triunfo obtenido en París con Sueño de una mañana de primavera (1897), obra de este autor, la convenció de que había encontrado al creador de la tragedia moderna. Desde entonces su repertorio estuvo formado casi exclusivamente por obras de este autor. Esta relación terminó en 1910, cuando el polémico escritor estaba metido en asuntos políticos (el escritor fue precursor del fascismo italiano) y despreocupado totalmente por Eleonora.
La ruptura de esos amores y una crisis de tipo religioso la llevaron, después de su éxito con La Locandiera de Goldoni, en 1909, a abandonrar inesperadamente el teatro, permaneciendo retirada durante doce años. Durante la guerra de 1914-18 la actriz prodigó su asistencia a los heridos y dio recitales en los frentes. Reapareció ante el público en Turín en 1921 con La dama del mar, negándose a ser maquillada y preocupándose tan sólo de ofrecer al público no una ficción, sino el fruto de una ansiosa búsqueda de la verdad interior. Añadiendo a su repertorio otras obras, reemprendió una nueva etapa de su vida artística, iniciando otra gira por Norteamérica, donde la sorprendió la muerte.
andromeda- Administrador
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Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
PERFUME CREADO PARA LA EXPOSICIÓN QUE SOBRE ELLA SE HIZO EN ROMA EN 2005
andromeda- Administrador
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Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
RAQUEL MELLER
En el viejo barrio del Cinto, en Tarazona, el 9 de marzo de 1888, nació Francisca Marqués López: Raquel Meller. Junto a sus padres, modestos comerciantes, estuvo muy pocos años. Acuciados por la precariedad económica la familia marchó primero a Tudela y luego, ya sin Francisca, a Barcelona. La niña quedó al cuidado de una hermana de su madre, monja en el convento de Santa Clara en Montepellier y más tarde en Gerona. Pero la contemplativa vida monacal no era del gusto de Francisca, quien volvió a reunirse con su familia en el Pueblo Seco de Barcelona, tan cerca del Paralelo.
La endeble posición familiar obligó a Paquita a encontrar trabajo en un taller de confección femenina, de la calle de la Tapinería, frecuentado por canzonetistas y vedettes de la época. Allí la vió y la oyó la entonces célebre en el Paralelo Marta Oliver, bajo cuya protección debutó en el pequeño salón La Gran Peña, en febrero de 1908 con el nombre de La Bella Raquel. Durante este mismo año recorre varios locales de Barcelona, Valencia, Sevilla, Cartegena y Madrid, cada vez con mayor éxito. Cambió su nombre, que fue ya para siempre el de Raquel Meller, al parecer en recuerdo de un fugaz amor alemán.
Raquel comienza su carrera en plena moda de la sicalipsis, que incluía un componente de provocación erótica que ella abandonó luego por el melodrama, la languidez, la espiritualidad y la delicadeza. Ella y su rival más directa, La Goya, se disputan el mérito de haber ensanchando el género para hacerlo apto a públicos mayoritarios. También fue musa para los intelectuales novecentistas -Alvárez Quintero, Manuel Machado, Galdós, Benavente, Eduardo Marquina, Angel Guimerá, etc-, como ha visto muy bien Vázque Montalbán: la convirtieron en musa de lo popular, porque ella estaba en la frontera entre lo aristrocrático y lo plebeyo.
El 16 de septiembre de 1911 debuta en el Teatro Arnau de Barcelona, donde su nombre fue anunciado en la fachada con dos hileras de bombillas, como el de una indiscutible estrella del espectáculo. El Teatro Arnau seguía llenándose en 1912, y se cuenta que en una función del Liceo en beneficio de la Asociación de la Prensa llego Raquel Meller a convocar a más de cuatro mil espectadores. En esta época, y de la mano del erudito de la tonadilla Fernando Periquet que la pone en contacto con Enrique Granados, Raquel incopora el género a su repertorio, destacando dos composiciones que irían con ella siempre: El Relicario y La Violetera.
En 1917, cuando trabajaba en el Trianon Palace de Madrid conoce al diplomático y escritor guatemalteco, Enrique Gómez Carrillo. Con él se casó el 7 de septiembre de 1919 en Biarritz. Días antes, Raquel Meller había debutado en Olympia de París, y no quiso que su nombre figurara en los carteles, para que no se dijera que había utilizado la influencia de su marido, muy famoso en la ciudad luminosa sobre todo después de su anterior romance con Mata Hari. El matrimonio se rompió en febrero de 1922 y en 1927 murió Gómez Carrillo. Raquel no fue a su entierro. Entre las causas de la ruptura de la pareja había estado la volubilidad del carácter y los desplantes de la Meller, a quien el propio rey Alfonso XIII dijo en una ocasión: "
Cuando te sale la maña eres imposible"
. Los años de su matrimonio con Gómez Carrillo coinciden con los de sus primeros y apoteósicos éxitos internacionales en Europa y América, donde recorrió Argentina, Uruguay y Chile.
Raquel Meller fue también una muy cotizada actriz de cine, medio para el que trabaja por primera vez en 1919 con la película Los arlequines de seda y oro. La buenísima acogida de que disfruta la película y sus triunfos en París, al mismo tiempo, la introducen en el cine de producción francesa: Rosa de Flandes (1922), Violetas Imperiales -uno de sus más famosos filmes- (1923), La tierra prometida . Otras películas rodadas por Raquel fueron Ronda de noche (1925), Carmen (1926) -otro de sus grandes éxitos-, La Venenosa (1928), Nocturno (1927). Ya para el cine sonoro rodó la versión de Violetas Imperiales en 1932 y comenzó en 1936 la película Lola Triana, interrumpida por la Guerra Civil.
Entre 1921 y 1925 alterna su quehacer cinematográfico con las presentaciones en teatros de Madrid y París principalmente. En 1926 marcha a Estados Unidos: recorre Nueva York, Filadelfia, Chicago, Boston, Los Angeles, Baltimore y regresa a Madrid en febrero de 1927. A partir de entonces y sobre todo ya en los años treinta París se convierte en uno de sus escenarios fijos y de hecho reside casi permanentemente en Francia. En París su popularidad alcanzó a la de Sarah Bernhardt, Mistinguette, Eleanora Duse, Isadora Duncan o Josephine Baker.
La Guerra Civil la soprende en su casa de Villefranche, y desde Francia marcha a Argentina en 1937. Allí permanece actuando hasta 1939.Tras la Guerra Civil regresa a Barcelona y contrae de nuevo matrimonio con Demon Sayac, empresario francés a quien había conocido en Niza. Con él estuvo casada cuatro años. En Barcelona vivió ya hashasta su muerte, bastante sola, pero no arruinada como se ha dicho muchas veces. Había adoptado dos hijos, Agustina (o Elena según otros) Gómez Carrillo y Jordi Enric Sayac. Pero con ninguno mantuvo una relación afectuosa ni estrecha.
Los años de esplendor habían terminado. Ya en la segunda mitad de la década de los treinta podía notarse el cambio de sensibilidad del público respecto al espectáculo: se impone el imperio del cine parlante, las orquestas de baile, la gran comedia americana. No obstante Raquel Meller reaparece en Barcelona en 1946 con la Compañía Vienesa de Revistas dirigida por Arthur Kaps y Franz Joham.Se sabe que todavía a finales de los años cincuenta hizo alguna esporádica actuación, resistiéndose temperamentalmete al olvido y arremetiendo orgullosamente contra sus seguidoras, ya fueran Lilián de Celis o Sara Montiel.
En abril de 1962 cae gravamente enferma e ingresa en el Hospital de la Cruz Roja. Muere el 26 de julio. Durante sus últimos días se recibían más de doscientas cincuenta llamadas diarias en el hospital, y mucho años después alguién seguía depositando un ramo de violetas en su tumba.
En el viejo barrio del Cinto, en Tarazona, el 9 de marzo de 1888, nació Francisca Marqués López: Raquel Meller. Junto a sus padres, modestos comerciantes, estuvo muy pocos años. Acuciados por la precariedad económica la familia marchó primero a Tudela y luego, ya sin Francisca, a Barcelona. La niña quedó al cuidado de una hermana de su madre, monja en el convento de Santa Clara en Montepellier y más tarde en Gerona. Pero la contemplativa vida monacal no era del gusto de Francisca, quien volvió a reunirse con su familia en el Pueblo Seco de Barcelona, tan cerca del Paralelo.
La endeble posición familiar obligó a Paquita a encontrar trabajo en un taller de confección femenina, de la calle de la Tapinería, frecuentado por canzonetistas y vedettes de la época. Allí la vió y la oyó la entonces célebre en el Paralelo Marta Oliver, bajo cuya protección debutó en el pequeño salón La Gran Peña, en febrero de 1908 con el nombre de La Bella Raquel. Durante este mismo año recorre varios locales de Barcelona, Valencia, Sevilla, Cartegena y Madrid, cada vez con mayor éxito. Cambió su nombre, que fue ya para siempre el de Raquel Meller, al parecer en recuerdo de un fugaz amor alemán.
Raquel comienza su carrera en plena moda de la sicalipsis, que incluía un componente de provocación erótica que ella abandonó luego por el melodrama, la languidez, la espiritualidad y la delicadeza. Ella y su rival más directa, La Goya, se disputan el mérito de haber ensanchando el género para hacerlo apto a públicos mayoritarios. También fue musa para los intelectuales novecentistas -Alvárez Quintero, Manuel Machado, Galdós, Benavente, Eduardo Marquina, Angel Guimerá, etc-, como ha visto muy bien Vázque Montalbán: la convirtieron en musa de lo popular, porque ella estaba en la frontera entre lo aristrocrático y lo plebeyo.
El 16 de septiembre de 1911 debuta en el Teatro Arnau de Barcelona, donde su nombre fue anunciado en la fachada con dos hileras de bombillas, como el de una indiscutible estrella del espectáculo. El Teatro Arnau seguía llenándose en 1912, y se cuenta que en una función del Liceo en beneficio de la Asociación de la Prensa llego Raquel Meller a convocar a más de cuatro mil espectadores. En esta época, y de la mano del erudito de la tonadilla Fernando Periquet que la pone en contacto con Enrique Granados, Raquel incopora el género a su repertorio, destacando dos composiciones que irían con ella siempre: El Relicario y La Violetera.
En 1917, cuando trabajaba en el Trianon Palace de Madrid conoce al diplomático y escritor guatemalteco, Enrique Gómez Carrillo. Con él se casó el 7 de septiembre de 1919 en Biarritz. Días antes, Raquel Meller había debutado en Olympia de París, y no quiso que su nombre figurara en los carteles, para que no se dijera que había utilizado la influencia de su marido, muy famoso en la ciudad luminosa sobre todo después de su anterior romance con Mata Hari. El matrimonio se rompió en febrero de 1922 y en 1927 murió Gómez Carrillo. Raquel no fue a su entierro. Entre las causas de la ruptura de la pareja había estado la volubilidad del carácter y los desplantes de la Meller, a quien el propio rey Alfonso XIII dijo en una ocasión: "
Cuando te sale la maña eres imposible"
. Los años de su matrimonio con Gómez Carrillo coinciden con los de sus primeros y apoteósicos éxitos internacionales en Europa y América, donde recorrió Argentina, Uruguay y Chile.
Raquel Meller fue también una muy cotizada actriz de cine, medio para el que trabaja por primera vez en 1919 con la película Los arlequines de seda y oro. La buenísima acogida de que disfruta la película y sus triunfos en París, al mismo tiempo, la introducen en el cine de producción francesa: Rosa de Flandes (1922), Violetas Imperiales -uno de sus más famosos filmes- (1923), La tierra prometida . Otras películas rodadas por Raquel fueron Ronda de noche (1925), Carmen (1926) -otro de sus grandes éxitos-, La Venenosa (1928), Nocturno (1927). Ya para el cine sonoro rodó la versión de Violetas Imperiales en 1932 y comenzó en 1936 la película Lola Triana, interrumpida por la Guerra Civil.
Entre 1921 y 1925 alterna su quehacer cinematográfico con las presentaciones en teatros de Madrid y París principalmente. En 1926 marcha a Estados Unidos: recorre Nueva York, Filadelfia, Chicago, Boston, Los Angeles, Baltimore y regresa a Madrid en febrero de 1927. A partir de entonces y sobre todo ya en los años treinta París se convierte en uno de sus escenarios fijos y de hecho reside casi permanentemente en Francia. En París su popularidad alcanzó a la de Sarah Bernhardt, Mistinguette, Eleanora Duse, Isadora Duncan o Josephine Baker.
La Guerra Civil la soprende en su casa de Villefranche, y desde Francia marcha a Argentina en 1937. Allí permanece actuando hasta 1939.Tras la Guerra Civil regresa a Barcelona y contrae de nuevo matrimonio con Demon Sayac, empresario francés a quien había conocido en Niza. Con él estuvo casada cuatro años. En Barcelona vivió ya hashasta su muerte, bastante sola, pero no arruinada como se ha dicho muchas veces. Había adoptado dos hijos, Agustina (o Elena según otros) Gómez Carrillo y Jordi Enric Sayac. Pero con ninguno mantuvo una relación afectuosa ni estrecha.
Los años de esplendor habían terminado. Ya en la segunda mitad de la década de los treinta podía notarse el cambio de sensibilidad del público respecto al espectáculo: se impone el imperio del cine parlante, las orquestas de baile, la gran comedia americana. No obstante Raquel Meller reaparece en Barcelona en 1946 con la Compañía Vienesa de Revistas dirigida por Arthur Kaps y Franz Joham.Se sabe que todavía a finales de los años cincuenta hizo alguna esporádica actuación, resistiéndose temperamentalmete al olvido y arremetiendo orgullosamente contra sus seguidoras, ya fueran Lilián de Celis o Sara Montiel.
En abril de 1962 cae gravamente enferma e ingresa en el Hospital de la Cruz Roja. Muere el 26 de julio. Durante sus últimos días se recibían más de doscientas cincuenta llamadas diarias en el hospital, y mucho años después alguién seguía depositando un ramo de violetas en su tumba.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
SUS FOTOS
EN ESTA FOTO LA ENCUENTRO GUAPISIMA
EN ESTA FOTO LA ENCUENTRO GUAPISIMA
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
RAQUEL MELLER PINTADA POR EL GRAN SOROLLA
POR LOS OJOS DE RAQUEL MELLER.- Lugar: Tribueñe. Director: Hugo Pérez. Intérpretes: Mª Ángeles Pérez Muñoz y Rocío Osuna, entre otros.
Un recorrido por la vida de una de las principales artistas españolas del siglo XX. Así, revisita sus comienzos en la Barcelona de 1907, su triunfo internacional y el regreso a la Ciudad Condal.
Por qué hay que verla
Se trata de una creación que mezcla texto y baile con el fin de recuperar, con música y canciones en directo, la trayectoria de una figura olvidada. La personalidad de la aragonesa Raquel Meller queda reflejada en este montaje de calidad, ideado por Hugo Pérez, que inicia su tercera temporada. Por algo será.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
Retrato de Raquel Meller, con el atuendo de "
El Relicario"
y la Plaza de Toros de Tarazona al fondo, obra del pintor Carlos Vázquez
El Relicario"
y la Plaza de Toros de Tarazona al fondo, obra del pintor Carlos Vázquez
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
El cordobés Julio Romero de Torres pintó en 1913 a la cupletista Raquel Meller --que también era una mujer morena-- en el cuadro Venus de la poesía (foto), que desde ayer está en el Museo de Bellas Artes de Bilbao. El pintor usó a varias modelos para el cuerpo y a la cantante, para la cabeza.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
UNO DE SUS ABANICOS
El abanico es de nácar marrón, tiene pequeños detalles pintados a mano y data de 1880.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
Raquel Meller tenía unos ojos preciosos y dicen que nadie cantaba el cuplé como ella. ¿Sería verdad que fue quien delató a Mata Hari por celos?
Helena- Non
- Mensajes : 10770
Fecha de inscripción : 21/07/2007
Localización : Madrid
Re: Coquettes de París
Andrómeda, como siempre me deleito leyendo este foro!
Mientras leía pensaba en lo intensas que han sido las vidas de estas mujeres. Todas ellas o casi todas han vivido varias experiencias diferentes, marcantes, profundas.
Helenita, hablando de vida intensa (recuerdas en el foro de Carolina) creo que estas mujeres sí que vivían intensa y apasionadamente!!!
Mientras leía pensaba en lo intensas que han sido las vidas de estas mujeres. Todas ellas o casi todas han vivido varias experiencias diferentes, marcantes, profundas.
Helenita, hablando de vida intensa (recuerdas en el foro de Carolina) creo que estas mujeres sí que vivían intensa y apasionadamente!!!
cortomaltese- Moderador
- Mensajes : 1946
Fecha de inscripción : 06/08/2007
Re: Coquettes de París
CHARLES CHAPLIN QUISO QUE RAQUEL TRABAJASE CON EL EN "
LUCES DE CIUDAD"
,PERO RAQUEL NO QUISO. CHAPLIN INCLUYÓ LA CANCION "
LA VIOLETARA"
EN LA PELICULA.
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
Corto, estas mujeres fueron ellas mismas sin importarles ningún tipo de convencionalismos y tampoco necesitaron ningún movimiento de liberación femenina para vivir como quisieron, fueron unas valientes y no cantaron en el coro de chicharras de ninguna época, fueron mujeres de rompe y rasga
La obra que están presentado en Madrid sobre la Meller la vi y ha tenido bastante éxito, se podía ver pero a mí no me gusto mucho como dibujaron al personaje, le han dado una connotación política que la Meller no tuvo, ya que vivió su vida a su manera y no fue militante de nada. Un poco payasa la obra.
La obra que están presentado en Madrid sobre la Meller la vi y ha tenido bastante éxito, se podía ver pero a mí no me gusto mucho como dibujaron al personaje, le han dado una connotación política que la Meller no tuvo, ya que vivió su vida a su manera y no fue militante de nada. Un poco payasa la obra.
Helena- Non
- Mensajes : 10770
Fecha de inscripción : 21/07/2007
Localización : Madrid
Re: Coquettes de París
Helena, habia leido algo sobre esa obra y decian que esta muy bien, pero yo, aunke no la he visto, opino como tú. Esta artista se dedicó a lo suyo y no creo que se metiese en política.
Corto: Yo tambien me fascino con las vidas que llevaron, todo lo que conocieron,......................
Mañana seguiré con esta gran artista
Corto: Yo tambien me fascino con las vidas que llevaron, todo lo que conocieron,......................
Mañana seguiré con esta gran artista
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
fueron unas valientes y no cantaron en el coro de chicharras de ninguna época, fueron mujeres de rompe y rasga
Esto es precisamente lo apasionante al leer sobre sus vidas... Eran ellas mismas, sin miedos, prejuicios.
Y daban su vida por el arte.
Hoy por hoy, los artistas están más al servicio del markting que del arte.
cortomaltese- Moderador
- Mensajes : 1946
Fecha de inscripción : 06/08/2007
Re: Coquettes de París
AQUI, YA MAS MAYOR
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
Re: Coquettes de París
MONUMENTO A RAQUEL MELLER EN BARCELONA. HAY TAMBIEN UNA CALLE Y UNA PLAZA CON SU NOMBRE
andromeda- Administrador
- Mensajes : 12291
Fecha de inscripción : 18/10/2007
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