Gran Duque Miguel Alexandrovich

Al día siguiente de la firma del manifiesto Miguel volvió a Gatchina. El Gobierno Provisional le proporcionó una guardia de honor que lo escoltó hasta la estación de tren. A primera vista, sin grandes algaradas y disturbios por las calles, una extraña calma aparentaba indicar que la decisión que había tomado era la acertada. Los ánimos parecían calmados, y el primer objetivo que se buscaba con su declaración se había conseguido. Al menos aparentemente. Fue ovacionado de forma espontánea por la multitud al llegar a la estación mientras se escuchaban gritos de “Viva Rusia”, quizás muchos de los congregados hubiesen querido gritar “Viva el Emperador”, pero no estaba la situación para alardes monárquicos y un “Viva Rusia” era mucho más prudente. Con los ánimos más calmados, al día siguiente salieron a la calle cinco periódicos en Petrogrado (el Birzhevye Vedemosti, Den, Petrogradsky Listok, Petrogradskaya Gazeta y el Rech ). El titular de todos ellos era el mismo, “Abdicación del Gran Duque Miguel Aleksandrovich”. Con ello se satisfacía temporalmente las exigencias del Soviet, ya que ese titular alimentaba la propaganda del Soviet sobre que la monarquía estaba acabada en Rusia. Tan solo uno de los periódicos, el Rech, respaldado por el partido Kadet, evitó la palabra “abdicación” y la cambió por “declaración”. Los acontecimientos demostraban que el débil Gobierno Provisional cada vez estaba más inclinado ante el Soviet y que la horrenda revolución de Octubre y la guerra civil se veían venir de forma inexorable.

A los pocos días de regresar a Gatchina, Miguel y su familia (y al decir “su” familia no me refiero solo a Natasha y a los niños, también me refiero a su fiel secretario Nicolás Johnson y a la poca servidumbre que seguía con ellos) se vieron, por orden del Gobierno Provisional, (seguramente presionado por el Soviet), confinados en la ciudad de Gatchina y sin poder salir de ella, en una especie de agradable prisión, parecida a la que su cuñada Alejandra sufría en Sarkoe Selo. Desde aquella relativa lejanía y seguridad Misha y los suyos contemplaron entre aterrados, asombrados e impotentes como se desarrollaban y se descomponían los acontecimientos de forma frenética. Como semanas más tarde un desesperado y transigente con el Soviet Kerenski declaraba que Rusia era una República, rompiendo el convenio de que solo una Asamblea Constituyente podía definir la forma del Estado, como los hombre del Soviet de Petrogrado se armaban hasta los dientes y como, por fin, estallaba la Revolución de Octubre y los bolcheviques se hacían con el poder. El Gobierno Provisional que había nacido de la Revolución de Febrero había dejado de existir. A partir de entonces Rusia ya no era ni una Monarquía, ni una República ni por supuesto una Democracia, a partir de entonces la desgraciada Rusia sería gobernada a discreción de los bolcheviques mediante el arresto o el fusilamiento de los opositores al bolchevismo... cualquiera que fuera el opositor.

En Gatchina los acontecimientos se sucedieron con la misma rapidez que en Petrogrado, había llegado el momento de pensar en la huida para Misha y los suyos, la frontera de Finlandia parecía la salida más segura, pero había que planearlo todo meticulosamente. Natasha, siempre previsora, empaquetó y escondió sus joyas, (¡no podía ni imaginarse la pobre lo bien que le iban a venir en el futuro, je,je,je¡). Todos los planes se tuvieron que ralentizar ya que la guardia que los custodiaba fue cambiada por el nuevo gobierno bolchevique y aunque no fueron molestados por la nueva guardia revolucionaria se sentían más vigilados que antes.

La navidad de 1917 pasó de forma triste, inquietante y aterradora. 1918 parecía llegar con nuevas esperanzas en Gatchina ante el avance alemán que quizás aplastase a la horda bolchevique en el poder y restaurase el orden. Era una amarga esperanza en la casa de un héroe de guerra.

¡Y ocurrió lo inevitable¡. La noche del 7 de marzo un grupo de hombres armados irrumpió en la casa de Miguel y le dijo de malos modos que el y Johnson estaban arrestados. La orden estaba firmada por Moisei Uritski, jefe de la temida y espantosa Cheka. Llevaron a Miguel y a Johnson a la capital y lo encerraron en el Instituto Smolni, la antaño exclusiva academia fundada por Catalina II tan solo para señoritas de la nobleza y ahora cuartel general de los bolcheviques.

La angustiada Natasha consiguió permiso para ir a la capital y ver a Miguel. Pasó la noche en casa de su amiga la princesa Olga Putyatina y al día siguiente ambas se dirigieron valientemente al ahora siniestro y gris Instituto Smolni. Le dieron permiso para ver a Miguel que se encontraba, junto con Johnson, encerrado en una enorme y destartalada habitación. Al verla Miguel se le acercó y se abrazaron en silencio, al parecer estuvieron juntos tan solo durante treinta minutos, al cabo de los cuales Natasha fue obligada a marcharse.

Esa misma noche veinticuatro comisarios se reunieron en el Smolni, entre ellos Lenin y el hombre que un día lo sucedería, José Stalin. La reunión era para aprobar el traslado del gobierno Bolchevique a Moscú ya que Petrogrado se encontraba demasiado cerca de las líneas alemanas y del cada vez mayor movimiento contrarrevolucionario, pero en el ultimo punto de la reunión se trató del destino del “ex Gran Duque Miguel Alexandrovich Romanov”, se aprobó por los reunidos mandarlo, junto a su secretario Johnson, al exilio a la ciudad de Perm en los Urales, a mil quinientos kilómetros de Petrogrado hasta nueva orden. La orden se confió al camarada Uritski, el mismo que había ordenado su detención días antes. Al llegar a Perm, después de un agotador viaje en un vagón para ganado en un tren exasperadamente lento, Miguel y su secretario fueron conducidos a la cárcel de la ciudad, desde donde pudo mandar un telegrama a su mujer e intentar tranquilizarla.

Mientras tanto Natasha, armándose de valor golpeaba a todas las puertas que podía exigiendo la liberación de su esposo, era una tarea frustrante pero su perseverancia dio su fruto y dos semanas después del ingreso en la cárcel consiguió levantar el encarcelamiento de Misha alegando problemas de salud, cosa que ocurrió cuatro días más tarde. Por supuesto Miguel y Johnson seguían bajo arresto bolchevique pero esta vez se encontraban arrestados en el hotel Korolev, que había sido inaugurado once años atrás y aun conservaba el encanto de haber sido el mejor hotel de Perm. Desde allí pudo escribir a Natasha notificándole su nueva situación.

Natasha era incansable, se daba perfecta cuenta de lo angustiosamente peligrosa que era la situación para todos ellos y si en un principio la situación de Misha era la más preocupante, ahora que este parecía estar en mejor situación el siguiente paso era poner a salvo a los niños, sobre todo le preocupaba su hijo Jorge, que aunque un niño de siete años no dejaba de ser un Romanov de los pies a la cabeza. Lo más razonable sería enviar a ambos fuera del país, ¿pero como?.

La princesa Putyatina sugirió hablar con los daneses, al fin y al cabo el rey Cristián de Dinamarca era primo de Miguel y por tanto Jorge era de su familia, ¿se negaría el rey danés a dar amparo a un niño de siete años y además de su misma sangre?. Se puso en contacto con la embajada danesa .El embajador, George Scavenius explicó la situación y solicitó instrucciones a Copenhague obteniendo autorización positiva.

Días más tarde Miss Neame, la institutriz de Jorge y éste se mudaron secretamente a una casa en Petrogrado y alli permanecieron ocultos durante cuarenta días, al cabo de los cuales le fue entregado a Miss Neame un pasaporte falso, donde constaba como viuda con un hijo y, disfrazada de campesina, embarcó en un atestado tren de la Cruz Roja que los llevó primero a la ciudad de Pskov, controlada por el ejercito alemán y de allí a Berlín, donde fueron de inmediato a la embajada danesa desde donde se trasladaron a Dinamarca. Al llegar a Copenhague fueron recibidos por un funcionario de la corte y llevados a palacio donde permanecieron como huéspedes del rey y la reina de Dinamarca. Jorge estaba a salvo.

Mientras tanto la situación de Miguel y Johnson se había aliviado bastante, seguían bajo arresto en el hotel Korolev pero tenía permiso para pasear por la ciudad, por supuesto siempre bajo la atenta vigilancia del Soviet local, y con la obligación de presentarse a diario ante la oficina de la Cheka local.. Al parecer durante esta etapa Miguel volvió de nuevo a ponerse en contacto con Natasha mediante cartas y telegramas y además fue agasajado en varias ocasiones por los lugareños, algunos de los cuales incluso se quitaban el sombrero respetuosamente a su paso. Pero era una situación que no podía prolongarse;
el Soviet en Perm era minoritario pero muchos de sus miembros no veían con agrado los ”privilegios” de Miguel. La opinión bolchevique empezó a agravarse cuando un regimiento de prisioneros de guerra Checos y Eslovacos consiguieron levantarse en armas contra sus carceleros en la vecina ciudad de Cheliabin y atacaron sin piedad a los bolcheviques haciendo peligrar su situación en la zona. Todo se complicó aún más cuando fue nombrado comisario de la Cheka de Perm un personaje siniestro, Graviil Myasnikov, fanático y revolucionario bolchevique...y estremecedoramente sangriento también. A partir de ese momento Miguel ya tenía los días contados, a los pocos días del nombramiento de Myasnikov los dirigentes de la Cheka local se reunieron y aprobaron la ejecución de Miguel. Al parecer fue una decisión del Soviet local, pero después del asesinato cuando el Soviet regional, con sede en Ekaterimburgo, conoció la noticia la aprobó sin objeción alguna y encubrió el asesinato a sangre fría de Misha ratificando la mentira oficial de la huida de Miguel.

El testimonio dejado por los verdugos en el informe que se remitió posteriormente a Moscú, describe la ejecución con un cinismo aterrador. Al parecer actuaron con increíble rapidez;
se dispuso que el “trabajito” lo realizaría un pelotón de individuos leales a la revolución y veteranos bolcheviques, estos fueron: Nicolás Zhuzgov, Vasili Ivanchenko, Andrei Markov, Iván Kolpashchikov y, por supuesto, Graviil Myasnikov, el jefe de la Cheka local. El plan era sencillo, se presentarían en el hotel a medianoche y le presentarían a Miguel una orden falsa del Soviet Regional de Ekaterimburgo, donde se le comunicaba su evacuación por razones de seguridad;
sería llevado a un bosque cercano y allí ejecutado sin contemplaciones. Al día siguiente se anunciaría que había escapado, se le buscaría (infructuosamente claro está), y con esa excusa se fusilaría a su secretario a quien se le acusaría de colaborador necesario en la huida. Para el secuestro y traslado se utilizarían dos carretas con caballos que dos horas antes ya estaban dispuestos.

Minutos antes de la medianoche el grupo se presentó en el hotel Korolev y enseñó al policía de la Cheka que lo custodiaba la falsa orden del Soviet Regional preguntando donde se encontraba la habitación de Miguel. Este se levantó salió de la habitación, leyó la orden y se negó a obedecer alegando querer hablar con el jefe regional de la Cheka y exigiendo para ello un teléfono. Se le contestó que no había tiempo y que se le proporcionaría más tarde. Comprendiendo que era inútil resistir Miguel empezó a vestirse. Johnson, que también se despertó, insistió en acompañarlo y le dijeron que si era eso lo que quería también se preparase y que no se preocupase por sus efectos personales o por los de Miguel, ya que se los enviarían más tarde. Miguel y Johnson se vistieron con rapidez y bajaron a la calle con los bolcheviques, subiendo cada uno con varios de sus captores en un carro distinto. Preguntaron cual era su destino y le dijeron que los trasladaban a un cruce ferroviario donde un tren los conduciría a la ciudad de Mogilev. Ambos guardaron silencio, los carros emprendieron la marcha y se perdieron en la oscuridad de la noche siberiana. Los dos carros redujeron la velocidad al llegar a un bosque llamado Malaya Yazovaya, y se internaron en el mientras les decían a Miguel y a Johnson que era un atajo hacia el cruce ferroviario. A doscientos cincuenta metros de la entrada del bosque los carros pararon y fueron bajados a tierra...al parecer no hubo explicaciones, ni ninguna de esas macabras ceremonias con que se oficia a los condenados, consistentes en dejarles fumar un ultimo cigarro o dejarles decir sus ultimas palabras. ¡Nada¡. Simplemente sacaron las pistolas y empezaron a disparar. El primero que cayó fue Johnson, Miguel intentó correr con los brazos en alto pero un tiro le hizo caer a tierra, después Myasnikov se acercó y lo remató de un tiro en la cabeza. Ivanchenko se acercó al cadáver de Johnson haciendo lo mismo. Después, allí mismo, cavaron una tumba, despojaron sus cuerpos de las pertenencias que llevaban y los enterraron juntos, eran las dos de la mañana del jueves 13 de junio de 1918, un año y tres meses después de la firma del manifiesto de Miguel.

Aun hoy se desconoce el lugar exacto donde están enterrados.

Poco después de la ejecución de Miguel, Myasnikov, en su condición de comisario de la Cheka de Perm fue a Ekaterimburgo, a una reunión del Soviet Regional, donde expuso de forma oficial la huida de Miguel y Johnson ayudado por desconocidos con uniforme militar;
naturalmente el Soviet Regional conocía ya todo lo sucedido, sin embargo mantuvo cínicamente la mentirosa versión oficial de la huida así que, oficialmente, Miguel estaba vivo y huido. Cuando la noticia llegó a Moscú se ordenó que no se diese a conocer lo sucedido y que se mantuviese a rajatabla la versión oficial por razones de política exterior. ¿Qué hubiese opinado el mundo si se descubría de pronto el asesinato de Miguel a sangre fría?. ¡Que curioso¡, Miguel II, el ultimo emperador, fue el primer Romanov en morir, cinco semanas más tarde le toco el turno a Nicolás II y a todos los Romanov al alcance bolchevique.

Curiosamente todos los Romanov que fueron ejecutados se hallaban relativamente cerca, Miguel en Perm, Nicolás y su familia en Ekaterimburgo y la Gran Duquesa Ella, (hermana de la emperatriz Alejandra) junto con tres de los hijos del Gran Duque Constantino, así como el príncipe Vladimir Palei en la ciudad de Alapaevsk. Todos estaban a merced de gente sin piedad, de verdaderos sicópatas que en algunos casos los ejecutaron de forma salvaje y bestial. En verdad que el final de los Romanov tiene visos de tragedia griega.

Pero oficialmente Miguel estaba vivo.

Natasha fue arrestada de inmediato. Cuando dejó de recibir cartas y telegramas de Misha y de Johnson, así como desde que escuchó los primeros rumores acerca de la huida de Misha, rumores que no dejaban de crecer, no dejó de acudir incansablemente, a la oficina de Uristki, (el jefe de la Cheka que había arrestado a Miguel) exigiendo explicaciones de lo que ocurría. Y Uristki, que sabía tanto como ella, ordenó encerrar a Natasha en la cárcel de la jefatura de la Cheka en la calle Gorojovaya 2, como sospechosa de haber ayudado en la huida.

No sabía con quien se topaba, Natasha se convirtió en un incordio, quejándose continuamente de todo y exigiendo toda suerte de cosas imposibles sin dejarse intimidar por sus carceleros. Los guardias de la Cheka, a los que trataba como a una pandilla de siervos imbéciles, terminaron por ceder y al día siguiente llego una procesión con mantas, camas, libros, velas, toallas y comida. De todas formas era un peligro constante el que permaneciese presa en la jefatura de la Cheka, ya que el destino que le esperaba era el traslado a una cárcel de mujeres, la tortura y el enjuiciamiento por conspiración. Sin embargo tenía una increíble baza a su favor, el hecho de que no se supiese que Misha estaba muerto y se creyese que estaba libre, esa circunstancia le salvó la vida.

Indudablemente una de las razones, que no la única, por las que el Soviet asesinó a todos los Romanov que cayeron en sus manos era porque no estaba dispuesto a consentir, en la medida de sus posibilidades, que alrededor de ninguno de ellos se pudiesen aglutinar las fuerzas contrarrevolucionarias. Sabían que un príncipe imperial popular y querido que encabezase un ejercito en armas sería, (como dijo Lenin), “un estandarte viviente” y que contaría con el apoyo tanto de las fuerzas que aun quedaban leales del ejercito imperial como de una población descontenta. También sabían que Miguel era de todos los Grandes Duques el más popular en Rusia y el que encontraría mayores adeptos entre los oficiales del ejercito. Pero también sabían que Miguel estaba muerto...pero eran los únicos que lo sabían. Así que dejaron, e incluso fomentaron, las noticias que decían que Miguel había escapado y que estaba vivo y organizando un ejercito en el corazón de Siberia. Tales noticias favorecían a los bolcheviques. ¡Mientras el más popular de los Romanov siguiera “vivo” y organizando ejércitos seria difícil que surgiera otro candidato al trono que lo hiciese¡. Los rumores cobraron cada vez más cuerpo e incluso el Times de Londres de 27 de junio de 1918 publicó los rumores del encabezamiento de un movimiento contrarrevolucionario en el Turquestán encabezado por Miguel. La creencia de que Miguel aun estaba con vida fue aceptada en el extranjero de forma generalizada, sobre todo la noticia fue creída en Berlin, a donde el embajador alemán en Rusia, conde Von Mirbach, envió informes acerca de los rumores que circulaban en todo el país, por lo que los alemanes decidieron atraerse a Miguel como fuera. Pensaban que un Miguel agradecido sería mucho más facil de atraer ¿y que mejor modo de hacerlo que rescatando a su mujer de las garras bolcheviques?.

Empezó la operación. A fines de agosto Natasha salió de la Jefatura de la Cheka camino de un hospital gracias al informe de un médico que confirmó que sufría de tuberculosis, agravada por el encierro. Desapareció por el camino.

Al tiempo también desapareció Tata, la hija de Natasha, que permanecía en Gatchina al cuidado de los pocos servidores que aun quedaban. La fuga de Tata resultó más fácil que la de Natasha, los alemanes la trasladaron en un atestado tren de gente que quería huir del país a Ucrania (en ese momento un país independiente de Rusia) con un pasaporte falso expedido a su nombre verdadero Natalie Mamontov. Tata viajaba con una maleta donde llevaba escondidas una pocas alhajas de su madre que pudo coger en el ultimo momento. Al llegara Kiev, Tata fue recibida por un agente alemán que la llevó hasta la casa donde vivía una amiga de Natasha, la princesa Vyazemskaya, que se hizo cargo de ella.

Mientras tanto Natasha permanecía oculta en una casa en Petrogrado, donde los alemanes les proporcionaron un pasaporte falso a nombre de Fray Tania Klenow, numerado con la cifra 4594, oficialmente una monja ucraniana. Y vestida de monja salió de su escondite en dirección a la estación de tren donde se unió a un grupo de monjas de la Cruz Roja, con las que salió acompañando a refugiados heridos camino de Kiev, en Ucrania, donde la esperaba su hija Tata. Una vez en Kiev, Natasha, Tata y la princesa Vyazemskaya viajaron a Odesa, donde se encontraba Matveev, el cuñado de Natasha. Fue una decisión acertada, en Odesa pudieron embarcar en el acorazado de guerra inglés Nereide, cuyo capitán, enterado de la situación, las tomó bajo su protección. Estaban a salvo. El Nereide recaló en Constantinopla, de allí un buque mercante las trasladó a Marsella, donde tomó un tren a París, de ahí viajaron a Londres.
Estaban a salvo.

Melogar:

Mis disculpas guapo. Con todo, reitero nuevamente mi agradecimiento por los relatos que has colocado aquí.

Tienes razón, el debate estuvo bueno, y muy ilustrativo para nosotros. He reconsiderado ciertas ideas que tenía, por lo que para mi, fue realmente fructífero. Así mismo, espero que los mismos se vuelvan a repetir más a menudo.

Un saludo para ti.


RosyDany ;
)

No me pierdo tu relato Melogar y lo estaba esperando. Te felicito.
Una cosa que no me queda muy clara es, por qué en algunos textos, se menciona a Miguel como IV de su nombre y en otros II.
Alguien me lo podría explicar.

A Miguel se lo nombra Miguel IV cuando se toman en cuenta los siguientes gobernantes:

1174 - 1176 Mikhail, hijo de Yuri Dolgoruki, gran principe de Vladimir - Suzdal, dinastia que goberno hasta 1238.

1304 - 1318 Mikhail de Tver, segundo hijo de Yaroslav III, gran principe de Vladimir, dinastia que goberno hasta 1380.

1613 - 1645 Mikhail I, de la dinastia Romanov.

En ese caso, Miguel es el "
cuarto"
Mikhail.

Si solo se toma en cuenta a la dinastia Romanov, en ese caso a Miguel se lo nombra como Miguel II, despues del primer zar de la dinastia, Miguel I.

Gracias.
Este Miguel Dolgoruky, príncipe de Vladimir - Suzdal, del siglo XII, será antepasado de Yourievkya Dolgoruka, Alejandro Dolgoruky, ayuda del Zar y otros distinguidos miembros de la familia Dolgoruky.

jimijoei escribió:Gracias.
Este Miguel Dolgoruky, príncipe de Vladimir - Suzdal, del siglo XII, será antepasado de Yourievkya Dolgoruka, Alejandro Dolgoruky, ayuda del Zar y otros distinguidos miembros de la familia Dolgoruky.

Jimijoei:

Estás en lo correcto. Son Príncipes de esa familia noble, que es una de las más antiguas en Rusia. Un Príncipe de esa familia, Yuri Dolgoruki, fue uno de los fundadores de Moscú.


Un saludo.

Hola a todos. Co esto se termina el relato acerca de Miguel.

Una vez en Inglaterra Natasha y Tata pasaron a residir a la pequeña localidad de Wadhurst, en Sussex, en una confortable casa estilo Túdor, que Misha había alquilado durante su estancia en Inglaterra, antes de volver a Rusia al estallar la primer guerra mundial. En la casa se encontraban en deposito las pertenencias que Miguel y Natasha habían comprado durante su anterior exilio en Inglaterra, entre ellas el Rolls Royce que Miguel le regaló a Natasha en uno de sus cumpleaños. El alquiler de la casa se pagaba gracias a los fondos que el previsor Misha había dejado en un banco de Londres para el alquiler y mantenimiento de la casa. Como los fondos dejados por Misha no eran nada desdeñables y como Natasha y Tata habían conseguido sacar una buena porción de sus joyas de Rusia, el dinero no era el principal problema (de momento), al menos hasta la aparición de Miguel, cosa que se esperaba de un momento a otro porque, asombrosamente, los rumores sobre su existencia persistían. Natasha se aferraba a eso aunque en su fuero interno seguramente estaba cada vez más convencida de lo contrario. Sin embargo la esperanza persistía. Por ahora lo primero era trasladar a Jorge desde Dinamarca. Tuvo la alegría de volver a abrazarle después de Pascua.

La vida diaria se imponía. Jorge fue enviado al St. Leonards-on-Sea College, un exclusivo y costoso internado en la costa sur de Inglaterra, con eso y la escolarización de Tata, aparte del sostenimiento de la casa de Wadhurst, el sostenimiento de la servidumbre y, por supuesto, el mantenimiento de un cierto “status social”, algo irrenunciable por parte de Natasha en aquellas fechas, hicieron que la situación económica empezara a menguar de forma lenta e inexorable. En 1919 Natasha recibió una carta de su suegra comunicándole que deseaba verla, tanto a ella como a Jorge. Natasha acudió un tanto alerta, aun no se le había olvidado la entrevista con la emperatriz María en 1913, pero esta vez la entrevista, por el contrario, fue cordial. La emperatriz al parecer se emocionó al ver a su nieto Jorge, tan parecido a su padre. La pobre anciana, hasta el final de sus días se negó a creer los informes acerca de la muerte de Nicolás y de Misha, aferrándose obstinadamente a la idea de que seguían con vida.

Con respecto a su hija Tata con diecisiete años resultó ser una adolescente precoz y difícil, por ello Natasha decidió inscribirla en el estricto colegio de señoritas Cheltenham de Gloucestershire. Aunque de poco sirvió, al cumplir los dieciocho años Tata cometió una de esas travesuras adolescentes que después se pagan caro, se casó en secreto con un estudiante de Oxford, Val Gielgud, (que luego seria jefe de radiodrama en la BBC). La boda se celebró el 12 de agosto de 1921 durante las vacaciones, después del enlace lo celebraron con un almuerzo y yendo al cine. Cuando Natasha se enteró reaccionó primero con incredulidad y luego con cólera. ¡Decididamente no pudo con ella¡. Tras la marcha de Tata con su flamante marido, y como el dinero cada vez escaseaba más, se mudó a un apartamento en Kensington... empezaba a bajar escalones aunque aún podía permitirse aparentar.

En cuanto a Tata siempre fue un rosario de disgustos. Como era de esperar su primer matrimonio fracasó y en 1923 se casó con un escritor y crítico musical, Cecil Gray, con quien tuvo una hija Pauline. En 1929 volvió a casarse, su tercer esposo se llamaba Michael Majolier, con quien tuvo otra hija, Alejandra. Como en el caso de su madre este tercer matrimonio fue el definitivo. Natasha nunca se llevó bien con su hija y siempre se quejó de su conducta. Tata falleció en Wanstead, en el condado de Essex, en 1966.

¿Y Miguel?, ¿dónde estaba Misha?. No aparecía. Desgraciadamente estaba sola y necesitaba hallar un medio para sobrevivir, así que inició la batalla para recobrar los fondos que pudiesen quedar de Miguel, así como la herencia que pudiese corresponderle. Para ello hubo de aceptar el hecho de la muerte de Misha. El 5 de julio de 1924 el tribunal superior de Londres emitió oficialmente esa declaración, por lo que pasaba a ser oficialmente su viuda y por tanto a administrar de forma oficial todas las propiedades y herencias que pudiesen corresponder a Miguel. Si los activos de Miguel en Inglaterra eran cada vez más reducidos, los de otros sitios prometían ser más sustanciosos. Sobre todo las propiedades que pudiese tener Misha en Polonia, donde poseía una finca. Se metió en litigios con el estado Polaco, que había nacionalizado las posesiones. Al final, como era de esperar, perdió el pleito. Mientras tanto el dinero que poseía desaparecía de forma inexorable, como sus joyas, que fueron empeñadas poco a poco y como el Rolls Royce, que, claro está, tuvo que venderse.

Como la vida en Londres era cada vez más cara Natasha decidió irse a vivir a Francia, mudándose a París en 1927. Además allí vivían los pocos parientes que le quedaban, entre ellos su cuñado Matveev, (el viudo de su hermana Olga), o su viejos amigos, como los príncipes Putyatin, que tenían un restaurante, los Vyazemski o el Gran Duque Dimitri que se había casado en Biarritz con una rica heredera americana de Cincinati, con la que tuvo un hijo Paul, que año mas tarde sería alcalde de la ciudad americana de Palm Beach.

En cuanto a Jorge al cumplir la edad adecuada ingresó en el ilustre Harrow, donde se matriculo con el nombre de conde Jorge Brasov, al parecer no descolló como un gran estudiante aunque no era de los peores. Al terminar sus estudios se fue a vivir a Paris con Natasha donde pensaba inscribirse en la Soborna. Durante esta época algunos emigrados rusos lo animaron a que se proclamase Zar en el exilio frente a las pretensiones de Kirill, pero Jorge trataba esas cuestiones con una total indiferencia. En 1928 la emperatriz María falleció y a su muerte la finca Hvidore en Dinamarca (que había comprado a medias con su hermana la reina viuda Alejandra) fue vendida. El rey Jorge V y sus hermanas renunciaron a sus derechos y el dinero de la venta, por tanto, se dividió a partes iguales entre los herederos de la difunta emperatriz, es decir entre Olga, Xenia y Jorge como heredero de Miguel. Correspondieron a cada parte unas tres mil libras, generosa suma que sirvió en primer lugar para comprar un automóvil nuevo, un Sports Chrysler, el resto sirvió para vivir un tanto más desahogados, aunque sin grandes pretensiones, así como para pagar los estudios de Jorge. En Julio de 1931, tras terminar sus exámenes en la Soborna, Jorge decidió pasar unas vacaciones en el sur de Francia, planeando viajar hasta Cannes con un amigo holandés, Edgar Moneanaar. Antes de partir Jorge y su amigo almorzaron en el apartamento de Natasha y luego esta bajo con ellos para despedirlos. Horas más tarde y mientras atendía una visita, sonó el teléfono y le comunicaron la atroz noticia de que el Chrysler de Jorge había patinado en la carretera de Sens y se había estrellado contra un árbol;
el joven holandés había muerto en el acto, Jorge tenía rotos los muslos y graves contusiones internas. La inconsolable madre tan solo pudo llegar para ver la agonía de su pobre hijo, que murió en sus brazos sin recobrar la conciencia a las once de la mañana del 21 de julio de 1931. Con Jorge moría todo lo que le quedaba a la desgraciada Natasha.

Su cuerpo fue trasladado a París y enterrado en el cementerio de Passy. A su funeral acudió casi toda la emigración rusa en Francia, cientos de personas. Natasha se negó a llorar en público, aunque en privado daba rienda suelta a su dolor y se la escuchaba gemir y llorar lamentándose por Misha y por Jorge. Natasha compró en el cementerio de Passi dos tumbas contiguas, en una sepultó a Jorge, la otra la reservó para ella.

El dinero se acababa, al final tuvo que desprenderse de la flauta de oro de Miguel, quizás el único recuerdo entrañable que le quedaba de su esposo, aun guardaba algunas condecoraciones de Misha, entre ellas la ordenes inglesas de la Jarretera y del Cardo. Intentó venderlas pero sin éxito ya que el gobierno inglés las reclamó alegando que sus condecoraciones no estaban a la venta y hubo de devolverlas. Ni aun siquiera recibió una cantidad compensatoria por parte del gobierno ingles. Todo se enrarecía;
en 1939 estalló la guerra y en junio de 1940 París fue ocupada. Tata, la hija de Natasha, no tuvo noticias de su madre hasta 1946 en que su joven hija Pauline fue a París a encontrarse con su abuela. Encontró a una anciana que pasaba hambre y vestía con ropa limpia pero harapienta. Desde entonces hizo lo que pudo por ella y desde Londres le mandaba esporádicamente algún dinero.

Ese dinero que le mandaba su nieta era todo lo que poseyó al final de su vida. Su hogar era un cuartucho en la azotea de un edificio de la calle Monsieur 11, que por caridad le había cedido una emigrada rusa la señora Amenkova, ésta no le pedía nada a cambio pero al parecer disfrutaba despreciándola. Al poco tiempo Natasha descubrió que tenía cáncer. La señora Amenkova, al enterarse, la echo del cuarto de la azotea sin contemplaciones.

Desamparada, Natasha ingresó en el hospital de la beneficencia de Laennec, donde murió, sola, el 23 de enero de 1952. Cumpliendo su voluntad, la emigración rusa en el exilio la sepultó junto a su bienamado Jorge. La tumba está señalada por una cruz rusa de piedra sobre una lápida de marmal verde y negro con esta sencilla inscripción “Fils et Epouse de S.A.I. Grand Duc Michel de Russie.

En un bosque olvidado de la lejana Perm, en una tumba desconocida descansan los restos del hombre que la amó apasionadamente y que, quizás, en otras circunstancias hubiese podido cambiar los destinos de Rusia y los del mundo entero. ¡No pudo ser¡.

Espero que todos aquellos que han seguido el relato acerca de la vida de Miguel Alexandrovich hayan disfrutado tanto como yo al investigar su vida. Reitero mi agradecimiento a Rosydany y a todos los demás por vuestras felicitaciones y vuestro aliento. Por ciento, amiga Rosydany, no tengo nada que disculparte por decirme “guapa” en vez de “guapo”, la verdad es que me hizo mucha gracia, y ademas, ¿como podías saber si Melogar tenía faldas o pantalones?, al fin y al cabo el nombre “Melogar” (que es un juego de palabras), no tiene sexo.

Antes de terminar la historia de Misha y su familia, creo que hay que puntualizar que la razón de que a Miguel Alexandrovich haya que denominarlo como Zar Miguel II de Rusia no es por el hecho de que perteneciese a la dinastía Romanov, sino por el hecho de que los Zares de Rusia son los continuadores de los Grandes Duques de Moscú, cuyo numeral siguieron los Zares de Rusia dejando a un lado el numeral que pudiesen tener como herederos (por enlace, anexión o conquista) de los distintos soberanos de los muchos principados y ciudades- estado que hubo en la turbulenta Rusia de la Edad Media y que en el transcurso de los años fueron absorbidos o conquistados por Moscú. El Gran Ducado de Moscú, (a finales de la Edad Media y tras la conquista del principado de Novgorod y la expulsión definitiva de los mongoles, que los ruso llamaron los tártaros), se convirtió en la indiscutible potencia hegemónica de la zona.

Es decir el Gran Ducado de Moscú fue para Rusia lo que Castilla para España, el estado unificador del territorio Ruso.

El primer Gran Duque de Moscú que se denominó Zar de Rusia fue el Gran Duque Iván IV de Moscú (el famoso Iván el Terrible) que pasó a ser Iván IV de Rusia. A partir de hay sus herederos, los Zares de Rusia, (y tambien, por tanto, herederos indiscutibles de los Grandes Duques de Moscú), respetaron el numeral de los Grandes Duques de Moscú. (El hermanastro de Pedro I el Grande, Iván Romanov, reinó como Zar Iván V). Por eso si tenemos en cuenta a Miguel Alexandrovich como Zar hay que denominarlo Miguel II, ya que en la genealogía de los Grandes Duques de Moscú, no hubo un Gran Duque de Moscú llamado Miguel. El primer Miguel en la genealogía moscovita fue Miguel I Romanov, Zar Autócrata de todas las Rusias.

Lo mismo ocurrió en España con sus monarcas a partir de la unificación efectuada por los Reyes Católicos. Sus herederos, los Reyes de España, respetaron en su nombres el numeral de los Reyes de Castilla. Por eso Don Alfonso, el hijo de Isabel II, fue reconocido Rey de España como Alfonso XII y los monárquicos españoles reconocían al Conde de Barcelona como Juán III. (El anterior rey que se llamó Juan fué don Juán II de Castilla, el padre de Isabel la Católica).

Miguel I fue, como ya dije antes, el primer Romanov en el trono ruso, pero si antes de el hubiese habido un Gran Duque de Moscú que se hubiese llamado Miguel I, el primer Romanov hubiese reinado como Miguel II y nuestro Misha habría pasado a ser Miguel III. Pero no fue así y por tanto es incorrecto decir Miguel IV .

melogar escribió:Espero que todos aquellos que han seguido el relato acerca de la vida de Miguel Alexandrovich hayan disfrutado tanto como yo al investigar su vida. Reitero mi agradecimiento a Rosydany y a todos los demás por vuestras felicitaciones y vuestro aliento. Por ciento, amiga Rosydany, no tengo nada que disculparte por decirme “guapa” en vez de “guapo”, la verdad es que me hizo mucha gracia, y ademas, ¿como podías saber si Melogar tenía faldas o pantalones?, al fin y al cabo el nombre “Melogar” (que es un juego de palabras), no tiene sexo.

Melogar:

Reitero mi agradecimiento por tu relato y la cantidad de datos que has aportado en este tema. Como comentaba anteriormente, a Misha le he visto con otros ojos, a raíz de que se abrió su propio foro.

Espero que continues con las colaboraciones por aquí, no te vayas a olvidar de nosotros, en especial de la Casa Imperial Rusa. Gracias Nuevamente.

Sobre lo de Miguel II, creo que ahora sí he entendido cómo es la cosa. Es la continuación de un legado. Que lindo detalle. Gracias por explicarlo tan ampliamente.


Un saludo.

Melogar, nuevamente felicitaciones. Que buen trabajo y sobre todo muy bien resumida la historia de Miguel II de Rusia de manera que nos permite conocer casi toda la información relevante para formarnos una idea de su persona.
Lo que me ha quedado más en claro es la grandeza de Miguel, como zar de Todas las Rusias, esto es algo que hay que destacar.
Es evidente que cuando estuvo en Gatchina, desde que se proclamó la república hasta marzo de 1918, tuvo el tiempo suficiente para huir y ponerse a buen recaudo con su familia en el extranjero. Pero no lo hizo.
Estoy seguro que sabia, que aunque proclamada la república, tenia una responsabilidad histórica y humanitaria para con su pueblo y no los podía abandonar, aunque al final (como sucedió) le costase la vida y la desgracia de su familia.
Dio su vida por la monarquía y sobretodo por su pueblo, a quienes quería dar una verdadera democracia con prosperidad, a diferencia de la Unión Soviética, que se alzo sobre la opresión del pueblo y matanzas que resultaron verdaderos genocidios.
Realmente, Rusia debería levantarle un monumento y rendirle homenaje como uno de los héroes que han dado la vida para que en su país haya democracia, libertad y justicia.

Hola a todos:

He traído una fotografía coloreada de Misha, cortesía de Ekaterina:




Un saludo.

Gracias Ekaterina .

Felicitaciones melogar por tu relato! Completisimo y ameno.

Me da mucha pena el fin de esta familia, Miguel asesinado y su cuerpo nunca hallado. Jorge fallecido tan joven, y Natasha muriendo de una enfermedad tan cruel y en la mayor pobreza...
Quien hubiera imaginado que todo acabaria tan tragicamente.

En la próxima semana. con el permiso de melogar y su lindo relato, comenzaré a poner información un poquito más detallada sobre Natasha y su vida.

Un saludo a todos, buen fin de semana.

cierto clelia,
esposa bellisima hijo encantador y no hemos encontrado sus restos todavia y fue el zar miguel iv¡¡¡¡¡
hubiera sido mejor zar que su hermano nicolas....
clelia es la protagonista de "
la cartuja de parma"

saludos

Espero impaciente a la espera de esa información que vas poner sobre Natasha Brasov, amiga Rosydany.

Estoy completamente seguro que será extensa y completisima, tan completa como toda la información que pones en el foro "
Diversos temas de la Rusia Imperial"
. Aplaudo con entusiasmo todo ese maravilloso trabajo con el que nos obsequias a tus seguidores y especialmente quiero felicitarte por el ultimo, esa estupenda biografía de la bailarina Ana Pavlova, ¡muy bien hecho¡. Felicidades otra vez y ánimo.

Ekaterina, ¿porque crees que los restos de Miguel Alexandrovich fueron incinerados?, ¿tienes alguna información sobre eso?.

Que yo sepa los cadáveres de Miguel y de Nicolás Johnson fueron enterrados juntos tras la ejecución sin más incidencias. Aunque al parecer actualmente hay colocada una cruz en el bosque donde fueron asesinados y justo en el lugar donde se cree, (y tan solo se cree), que descansan sus restos ya que nadie sabe con exactitud el sitio exacto de la dichosa tumba.

Intuyo que esa tumba nunca será encontrada y por tanto los restos de Misha nunca serán rescatados del lugar donde descansan, ¿sabes porque intuyo eso? pues porque ese descubrimiento conllevaría una exhumación de los restos de Miguel y por tanto abriría una polémica acerca del lugar donde deberían de sepultarse definitivamente sus huesos puesto que si se admite que fue emperador como ultimo Zar tendría derecho a descansar en la cripta de San Pedro y San Pablo de San Petesburgo, junto a los de su hermano Nicolás, y por tanto habría de dársele los mismos honores que se le dió a los restos de Nicolás II y de su familia cuando fueron trasladados allí y no creo que el actual gobierno ruso esté por la labor.

mi querida ekaterina,
espero te equivoques y no era costumbre incinerar,
albergo la esperanza de hallarlos cerca de perm,
gracias como siempre gran duquesa de viña del mar

estimada rosydany,
muy agradecido por cualquier informacion sobre la condesa brassova,
la mujer mas bella de la familia imperial aunque morganatica,
nuestro misha la quiso hasta el final¡¡¡¡

cierto ekaterina fue muy triste pero hay bastantes herederos constantinovich para reclamar el bello palacio de pavlovsk....

creo que miguel 2 es la expresion mas acertada
hace falta una extensa biografia de nuestro misha
muy bueno tu relato melogar
gracias